Origenes Históricos

Aunque en épocas antiguas estaba ocupado el territorio de Gargallo, no va a ser hasta en época de Reconquista comienza a aparecer Gargallo como población.
Se conserva documentación fechada el 15 de marzo de 1209, en la que el rey de Aragón Pedro II entregó a Miguel Sancho los lugares de Estercuel y Gargallo.
Gargallo a diferencia de poblaciones de su entorno va a permanecer en manos privadas, frente a las encomiendas de las órdenes militares de Aliaga, Montalbán y Alcañiz.
En documentación posterior fechada en el 18 de septiembre de 1320 se menciona que Gargallo se encuentra bajo jurisdicción de Martín Gil de Atrosillo.
La población a lo largo de los años va cambiando de propietario, así el 10 de julio de 1357 aparece como propiedad de Juan Jiménez de Luna.
Siglos más tarde, en 1610 pertenecía a Luís de Bardají. Siguió en manos de familias nobiliarias hasta que en el siglo XIX con las desamortizaciones pasaron las tierras a los vecinos del municipio y al ayuntamiento.
En cuanto a administración, Gargallo ha formado parte, de forma sucesiva, a la sobrecullida de Alcañiz (1488-1495), a la vereda de Alcañiz (1646) y al corregimiento de Alcañiz (1711-1833). Se constituye como Ayuntamiento en 1834. Desde 1834 hasta 1887 forma parte del partido judicial de Aliaga; se une de 1897 hasta 1900 al partido de Montalbán; cambia al de Aliaga entre 1910 y 1920; en 1930 pasa al partido de Montalbán; vuelve entre 1940 y 1965 al de Aliaga, para incorporarse, finalmente, en 1965 al partido judicial de Teruel.